Durante este mes, tres familias han sido beneficiadas con esta iniciativa que busca ayudar a personas con diferentes discapacidades a mejorar su calidad de vida.
Por largo tiempo, Jennifer Pradenas, de 27 años, soñaba con poder contar con una silla de ruedas propia que le permitiera poder desplazarse con mayor comodidad. La enfermedad congénita que padece, no tan solo afectó su parte intelectual, también inmovilizó sus piernas.
Hasta ahora contaba con una silla de ruedas, pero a como dato, situación que le generaba a ella y su familia una gran angustia por no saber en qué momento ésta le iba a ser arrebatada. Pero gracias a la gestión de la Municipalidad de Rancagua, el gran anhelo de Jennifer hoy es una realidad.
Durante el mediodía de este martes 23 de agosto, la joven recibió de manos del alcalde Eduardo Soto, la silla de ruedas que tanto esperaba ella y su madre. “Llevo mucho tiempo esperando esta silla de ruedas, era lo que deseaba, con ella voy a poder ir a todas partes y me va ayudar harto”, agradeció emocionada Jennifer.
“Me siento feliz porque realmente la necesitaba para poder transportar a mi hija y es una ayuda que esperaba por mucho tiempo”, señaló Digna Miranda, madre de la joven, quien además acotó que “ahora va tener en que movilizarse, como ella no camina y se desplaza con mucha dificultad”.
El caso de Jennifer es un ejemplo de cómo el Programa de Ayudas Técnicas, ejecutado por el municipio, busca mejorar la calidad de vida de quienes más lo necesitan. En lo que va del mes, ya son tres jóvenes rancagüinos los que se han beneficiado con esta iniciativa, una cifra que seguramente seguirá aumentando.