- Estudiantes de los colegios Alberto Blest Gana y Aurora de Chile accedieron a la invitación extendida por el alcalde Eduardo Soto y el Club Aéreo Rancagua para conocer la comuna desde lo alto.
Más de 120 niños de los colegios municipales Aurora de Chile y Alberto Blest Gana, participaron de la invitación realizada por el alcalde Eduardo Soto y el Club Aéreo de Rancagua: conocer la ciudad desde los aires como premio a su excelente rendimiento en la última prueba Simce.
Y es que dentro de su calendario de actividades anuales, el Club Aéreo de Rancagua, presidido por Juan Acevedo, establece un fin de semana para invitar a niños de establecimientos municipales a vivir la gran experiencia de volar.
Esta vez no fue la excepción y aunque las condiciones atmosféricas amenazaron con impedir la travesía, el sábado y domingo desde los pequeños pudieron ver su ciudad desde lo alto.
Un recorrido que se iniciaba hacia el sur por el río Cachapoal, Cerro Orocoipo, regresando hacia el norte, cruzando la ciudad, pasando por el sector norte y retornando a la base situada en el sector Baquedano, detrás el Regimiento de Aviación.
Juan Acevedo, presidente de la entidad, explicó la importancia y satisfacción que significa esta actividad social para el club aéreo que dirige, pues otorga alegría a muchos niños y sus familias, ya que sin duda es un día que nunca olvidarán.
La Directora de Educación de la Corporación Municipal de Rancagua, Jacqueline Ramos, agradeció a la institución por tan noble gesto y dijo que estas iniciativas de esparcimiento para los estudiantes son un aporte al desarrollo integral que busca proporcionarles Cormun Rancagua y una oportunidad de compartir y conocer.
Ambas jornadas fueron coordinadas por el Departamento de Actividades Extracurriculares (ACLE) de la Cormun, en conjunto con el Club Aéreo Rancagua.
Tras la maravillosa aventura de volar, los niños recibieron un diploma por su participación, que certifica que ahora son "Aguiluchos del Aire". Además, fueron agasajados con colaciones, recorrieron e "inspeccionaron" los aviones, conversaron con los pilotos y, en definitiva, vivieron una experiencia única.