2010-06-01

Bienestar entregó becas a hijos y funcionarios

Setenta jóvenes y niños fueron los galardonados en ceremonia que se realizó en el salón de la Municipalidad de Rancagua

A la ceremonia, que se realizó en el salón de actos del Municipio, asistieron el Alcalde Eduardo Soto; el concejal Edison Ortiz; la administradora municipal Julia González; la directora de Secplac, Alejandra Mori, la directora de Dideco, Mónica Toro; el presidente del Comité José Prado, numerosos funcionarios municipales y sus familias.

José Prado señaló que "esta ceremonia tiene por objetivo celebrar los méritos académicos en compañía de los familiares, para hacer un público reconocimiento, ya que han demostrado una gran dedicación en el aprendizaje y es una justa recompensa al esfuerzo de cada uno".

El presidente del Comité de Bienestar agregó que "es también el justo reconocimiento para los funcionarios municipales que, dejando de lado a sus familias, optaron por una forma de acrecentar sus conocimientos, dedicando tiempo a estudiar y capacitarse".

Por su parte, el Alcalde Eduardo Soto recalcó que "cuando se trata de estimular los logros en el ámbito de la educación, tiene una mayor connotación, porque se trata de destacar el mejor rendimiento a través de una ayuda y un estímulo".

El edil agregó que "nos alegramos mucho por el número de becas que se entregan, entendiendo que detrás existe un esfuerzo individual y de cada familia, porque la educación es la herramienta más importante para continuar enfrentando la vida estudiantil y laboral", enfatizó Soto.

A nombre de los homenajeados habló el socio de bienestar Claudio Peñaloza, quien agradeció señalando que "esta es una instancia que nos hace sentirnos orgullosos de nuestros hijos, porque están llamados a iluminar sus historias, porque tienen las herramientas y son capaces de llegar a metas importantes en la vida, así se pueden construir mejores cosas".

La actividad se enmarca en el plan de beneficios que el Comité de Bienestar otorga a todos sus socios, con un costo para este año de dos millones 232 mil pesos.

El marco lo puso el estudiante de piano de la Universidad Católica, Héctor Toloza, quien deleitó a la concurrencia con sus interpretaciones.