Concejo aprobó nueva ordenanza. Alcalde Eduardo Soto señaló que iniciativa busca dar tranquilidad a los vecinos.
Evitar focos de delincuencia, microbasurales y dar curso a un constante requerimiento de la comunidad, fue el objetivo de la ordenanza municipal aprobada el último martes, y que permitirá al municipio, iniciar el retiro de vehículos abandonados desde la vía pública.A sabiendas de los requerimientos planteados por la ciudadanía, el Concejo Municipal aprobó de forma unánime esta ordenanza, la que comenzará a regir en los próximos días.
La ordenanza establece que el retiro de los vehículos puede ser realizado por Carabineros, o inspectores municipales. También, la norma establece los valores por el retiro de vehículos hasta los recintos municipales establecidos para tales efectos y además, las tarifas por mantenerse en el corral municipal.
El alcalde Eduardo Soto, señaló que con esta ordenanza se hace eco de un requerimiento de la comunidad. "Hay gente que ha tomado las calles para guardar los vehículos abandonados, los cuales rápidamente se transforman en focos delictuales. Con esta iniciativa buscamos devolver la tranquilidad a los vecinos", explicó.
El alcalde agregó que una vez esté publicada la ordenanza, el municipio iniciará a hacer limpieza en las calles de todos los vehículos que muestren signos de estar abandonados.
LO QUE DICE LA NUEVA ORDENANZA
Quedarán sujetos a la presente Ordenanza, todos los vehículos que objetivamente permitan aseverar que están abandonados en la vía pública, calzadas, aceras, platabandas o bandejones, plazas y parques, entre otros.
Esto es, aquellos vehículos abandonados en la vía pública, que permanezcan en un mismo lugar sin el uso propio de su naturaleza o que se encuentren estacionados sin conductor por un período superior a 10 días en la vía pública.
Cualquier persona podrá denunciar por escrito a la Municipalidad la existencia de un vehículo abandonado en la vía pública, lo cual será verificado y certificado por inspectores municipales, comprobarán objetivamente su estado de abandono.
Los inspectores municipales procederán a colocar en el parabrisas o cualquier otro lugar visible un adhesivo, señalando la infracción cometida, dejando constancia por escrito del hecho, e indicando que al cabo de 10 días se procederá al retiro del vehículo desde la vía pública.
Transcurrido este plazo desde la notificación de los inspectores, los vehículos abandonados serán retirados de la vía pública y se denunciarán las infracciones al Juzgado de Policía Local y los vehículos serán enviados al Aparcadero Municipal.