El multitudinario espectáculo contó con la animación del conductor de televisión Eduardo Fuentes y la actuación estelar de Katherine Orellana, los éxitos del grupo Los Vásquez y el ídolo de la música tropical Américo.
Alrededor de 50 mil personas llegaron este domingo por la tarde hasta la explanada de avenida República de Chile -a un costado del complejo deportivo Patricio Mekis- a disfrutar del Show Final de las Fiestas Rancagüinas 2014, espectáculo que este año contó con la animación del conductor de televisión Eduardo Fuentes y la actuación estelar de Katherine Orellana, el grupo Los Vásquez y el cantante Américo.
La carismática “morenaza” fue la encargada de abrir los fuegos con un tributo al también rancagüino Lucho Gatica, para luego realizar un repaso por los éxitos que la lanzaron al estrellato tras su paso por el programa "Rojo: Fama contra Fama".
En la oportunidad, Katherine Orellana se hizo acompañar por un selecto grupo de músicos locales, así como por bailarines de la academia de Rodrigo Díaz, lo que provocó que todos los presentes quedaran encantados con su lúcido espectáculo.
Tras esto, y ante la gran expectación del público, fue el turno de subir al escenario de Los Vásquez, quienes conquistaron a la fanaticada local con un variado repertorio de canciones que incluyó lo mejor de sus discos "Contigo pop y cebolla" y "De sur a norte".
Fue así como los hermanos coyhaiquinos Italo y Enzo hicieron cantar a todos con éxitos como “Juana María”, “Dónde está tu amor” y “Enamorado”, le pusieron el toque romántico con hits como “Tú me haces falta” y “Basta” y cerraron su show con su balada “Miénteme una vez”.
Luego de esta gran actuación, llegó quizás el momento más esperado por los asistentes a esta gran jornada de celebración. En un ambiente de gran algarabía, el animador Eduardo Fuentes presentó al esperado ídolo de la música tropical Américo, quien por más de una hora y media recorrió lo mejor de su discografía e incluso se dio el tiempo para promocionar su último trabajo “Américo de América”.
Finalmente, la celebración de los 271 años de la fundación de Rancagua concluyó con un colorido espectáculo de fuegos artificiales que iluminó los cielos de la ciudad.