Evento deportivo tuvo la particularidad de que el llegar primero no era lo más importante, sino más bien el tener ganas de divertirse y pasarlo bien. De hecho, no se toman los tiempos y no hay un ganador de la prueba.
Con gran éxito, y superando con creces todas las expectativas, este sábado recién pasado se llevó a cabo la primera corrida nocturna de Rancagua, evento deportivo que llenó de colorido las calles de la ciudad y que tuvo la particularidad de que el llegar primero no era lo más importante, sino más bien el tener ganas de divertirse y pasarlo bien.
La entretenida prueba, que contó con el auspicio del municipio rancagüino, y que logró congregar a más de tres mil entusiastas competidores de todas las edades, tuvo su punto de partida en el complejo deportivo Patricio Mekis, lugar donde se montó un gran escenario para la ocasión.
Como ya está dicho, y aunque resulte raro, no se tomaron los tiempos y no hubo un ganador de la carrera, ya que el foco de esta competencia está centrado en la diversión de los corredores, sin importar que éstos sean principiantes o compitan a nivel profesional.
Fue así como los asistentes vivieron una experiencia única, al verse envueltos en una verdadera explosión de polvos de colores fluorescentes, los cuales se acentuaban aún más cuando los atletas cruzaban grandes pórticos iluminados con luz ultravioleta.
Cabe precisar que esta primera corrida nocturna tuvo un trazado de cinco kilómetros, el cual comenzó en avenida República de Chile, para luego enfilar por avenida Illanes, continuar por avenida Grecia en dirección a la calle Germán Ibarra y finalmente retornar por avenida Viña del Mar hasta el punto de partida antes mencionado.
Para el alcalde Eduardo Soto, la evaluación de esta primera experiencia fue positiva, por lo cual no descartó que el próximo año se realice nuevamente esta colorida prueba, esperando que esta vez sean muchos más los rancagüinos interesados en participar.
La corrida nocturna concluyó con una fiesta al aire libre, que entre otros contó con la participación de DJ Byte, chileno que disputó la final del Red Bull Thre3Style en Canadá, una de las competencias más exigentes a nivel internacional, y quien además es hoy el encargado de prender las noches en la discoteque Suka del Casino Monticello.