Gracias a la gestión realizada por la Municipalidad de Rancagua se reconoció a dos grandes exponentes de la música popular que han enorgullecido a los chilenos y sobre todo a los rancagüinos.
El alcalde de Rancagua, Eduardo Soto, asumió el compromiso del Municipio para concretar la esperada escultura que embellecerá la ciudad y que se ubica a las afueras del Teatro Regional de Rancagua. "Rancagua y la Municipalidad vienen a saldar una deuda histórica con dos figuras consagradas de la música chilena, que con su trayectoria, calidad, popularidad y fama alcanzada durante muchas décadas y en diferentes latitudes, no tenían en la ciudad un espacio donde se les recordara como corresponde" señaló el Alcalde Soto.
El proceso comienza a tomar forma, cuando en el 2014 el concejal Arturo Jara y el artista René Valdés en una conversación en su programa de Radio Orocoipo, platean la posibilidad de rendirle un homenaje a estos grandes rancagüinos, a lo que se suma Arturo (Turín) Gatica, hijo de Arturo Gatica, quienes le plantean al edil la idea de que la ciudad natal de estos célebres hijos ilustres los inmortalice, no dudando la autoridad en dar el "vamos" para comenzar las obras.
Al respecto, el concejal Arturo Jara afirma: "presiento que este proyecto es algo emblemático para todos especialmente para Rancagua. Es un homenaje que estaba en deuda y un sueño anhelado por muchos".
El proceso se inició en el 2015 con los escultores Sergio (Cheko) Urbina y Fernanda Cerda, quienes tuvieron la gran misión de dar vida a las figuras realistas. En una reunión, junto con la presencia del Alcalde Eduardo Soto, el concejal Arturo Jara, el artista René Valdés, "Turín" Gatica y Yolanda Gatica, hermana de los artistas destacados, se comenzaron a gestar las ideas de cómo se plasmaría la escultura. Al revisar las maquetas, Turín Gatica, no dudó en afirmar que quien estaba representado era su padre Arturo Gatica, reafirmado por su hermana "Yolita", quienes emocionados asentaron que la obra era fiel reflejo del carisma de los Gatica.
Para el artista plástico "Cheko" Urbina, en palabras de su viuda Ximena Herane, "fue un tremendo orgullo haber sido elegido en tan importante misión, él (Urbina) vibró con cada detalle y tomó la responsabilidad de representar a los hermanos en la escultura, la que se transformaría en su última gran obra antes de fallecer, dejando este gran legado para la ciudad", afirma.
Juanita Gatica, hija de Lucho Gatica, se mostró muy emocionada durante la ceremonia, "Todo esto es algo tan maravilloso y emotivo para mí, mis hermanos y mi papá. Yo sé que, si él hubiera estado aquí, hubiese estado muy contento. De verdad, les vuelvo a agradecer muchísimo lo que hicieron, era algo que se lo merecía, pedíamos con el pensamiento que fuera reconocido en su querida Rancagua", señaló.
Una vez elaborado el molde de la obra, se procedió a realizar la fundición en bronce bajo la técnica de cera perdida a escala natural de cuerpo entero y de pie por el artista Grimber Mordoj.
La altura de la obra es de 2,2 metros y tiene un peso alrededor de 300 kg. La icónica escultura puede ser visitada de forma gratuita por todo el público en el Teatro Regional de Rancagua, ubicado en Millán 342.