Rancagua recordó los estandartes perdidos de la Batalla

Instituciones comunales y regionales recordaron a los héroes patriotas y las banderas robadas por los realistas, que posteriormente se recuperaron y se perdieron.

Durante la batalla protagonizada hace 204 años en el centro cívico de Rancagua, un grupo de realistas robó cinco estandartes muy valiosos para los patriotas: dos del del Batallón Infantería de Granaderos, el del Batallón 3 de Auxiliares, una bandera de guerra, y la famosa bandera negra que indicaba la no rendición. Doscientos dos años después, el Instituto O’Higginiano investigó y creó unas réplicas de las banderas que fueron robadas y enviadas a Perú como trofeos de guerra, luego recuperadas por nuestro país, y posteriormente perdidas en territorio nacional.

Como forma de conmemorar estos emblemas de la ciudad, durante la noche del lunes 1 de octubre autoridades comunales se reunieron para recordar a las tropas patriotas que participaron en la Batalla de Rancagua de 1814. Para ello, un grupo de estudiantes de cinco establecimientos educacionales de la capital regional tomaron las réplicas desde la Iglesia La Merced y las llevaron hasta el monumento a Bernardo O’Higgins, donde instituciones regionales y comunales entregaron sus respetos a los héroes de Rancagua.

La actividad estuvo encabezada por el alcalde de Rancagua, Eduardo Soto; por el comandante de la Brigada de Aviación del Ejército, general Gustavo Núñez; por el presidente del Instituto O’Higginiano, general (r) Antonio Yakcich; más autoridades de Carabineros, PDI, Bomberos, y vecinos de la ciudad.

Las réplicas de los estandartes perdidos fueron portados por los estudiantes de los establecimientos municipales: Colegio Moisés Mussa, Liceo de Niñas, Liceo Óscar Castro Zúñiga e Instituto Tecnológico Minero Bernardo O’Higgins; más el Instituto O’Higgins.

“Tiene mucha significancia tomar una parte importante de la historia de la Independencia de nuestro país, acaecida precisamente aquí en Rancagua en la Plaza de Los Héroes, y que sea revalidada esta historia y puesta en vigencia con la entrega de estos estandartes a jóvenes de colegios vinculados a la historia de Bernardo O’Higgins. Es para nosotros una ceremonia tan importante como el propio desfile. Estamos contentos por el contenido logrado”, indicó el alcalde de Rancagua, Eduardo Soto, que agregó que “estos estandartes perdidos quedan en exhibición permanente en la Iglesia La Merced”.

Por su parte, el presidente del Instituto O’Higginiano, general (r) Antonio Yakcich, señaló que “anualmente la Municipalidad, la Gobernación de Ejército y el Instituto O’Higginiano recuerdan no solo la batalla en si misma, que tiene un significado para todo rancagüino porque nos trae la gesta más heroica de la ciudad, sino que a los estandartes perdidos de la batalla y sus réplicas, que están a diario en la Iglesia de La Merced, y que al cumplirse el 1 de octubre son tomados por las juveniles manos de los estudiantes para mostrárselos a la ciudad y decirles que aquí están sus raíces, lo que nos perpetúa en el tiempo lo que somos como sociedad”.

A su vez, el comandante de la Brigada de Aviación del Ejército, general Gustavo Núñez, indicó que “para el Ejército todas las conmemoraciones de batallas, y particularmente la de Rancagua, son muy relevantes, porque habla de la comunión del Ejército y la sociedad. La Independencia la hizo no solo el Ejército, también la hizo la comunidad”.