La representante de Juan Guaidó en Chile se reunió con vecinos venezolanos de la capital regional para conversar diversos temas que los afectan.
La crisis político-social que vive Venezuela ha provocado una de las migraciones más importantes que haya vivido el continente durante las últimas décadas. Son millones los llaneros que han escapado de su país, principalmente hacia los países andinos, es decir Colombia, Ecuador, Perú y Chile. Nuestro país los ha recibido durante las tres olas migratorias, siendo la última (2018) la más masiva; se calcula que hoy en día son cerca de 1 millón 250 mil los venezolanos en Chile, siendo la primera colonia extranjera.
Como forma de apoyar la integración de esta comunidad en la sociedad nacional, la representante diplomática de Venezuela en Chile, Guarequena Guitérrez, visitó la ciudad de Rancagua para compartir un conversatorio con los vecinos venezolanos de la capital regional. La cita se realizó durante la tarde del viernes 31 de mayo en el Salón Auditorio de la Municipalidad de Rancagua, donde compartió mesa con el alcalde de la comuna, Eduardo Soto, el senador Alejandro García Huidobro, el diputado Issa Kort, el director de Salud de la Cormun, José Antonio Cavieres, más representantes del Ministerio del Interior y de la Gobernación de Cachapoal.
En la ocasión se tocaron diversos temas, como la legalización de los papeles migratorios, las opciones de trabajo, la convalidación de títulos (una de las olas migratorias trajo a muchos profesionales), la salud, entre otros. Muy importante fue que los presentes (más de 150), pudieron preguntar y hacer observaciones de su estadía en Rancagua y Chile; al final una jornada provechosa que les permitió sentirse un poco más en casa.
“Estuvimos reunidos con los pobladores venezolanos de Rancagua, con la diáspora (dispersión de grupos). Agradecemos mucho a Chile que nos reciba, pero lo que realmente queremos nosotros es volver a nuestro país, a reconstruirlo, porque está completamente destruido. Sin embargo, acá el alcalde Eduardo Soto nos ha dado un recibimiento caluroso, que se siente desde que uno entra a Rancagua; se nota la tilde humanista”, indicó la diplomática llanera.
Respecto al actual gobierno de Nicolás Maduro, Guarequena Gutiérrez señaló que: “hoy fue una reunión muy productiva con la diáspora venezolana en Rancagua, y se siente el apoyo que tenemos para reconstruir Venezuela. Desde hace 20 año que la política internacional de Venezuela se hacía a través de los ´petrodólares´, y no a través del carácter humanista, que es lo que nos ha pedido el Presidente Guaidó, el Presidente constitucional de Venezuela”.
Por último, la representante del gobierno interino venezolano comandado por Juan Guaidó, señaló que “lo que más quieren los venezolanos es regularizarse, es estar completamente legal en Chile y empezar a aportar; ellos no quieren que les regalen nada, quieren trabaja, y para ello deben estar regularizados”, finalizó.
POSITIVO BALANCE
Una vez finalizado el conversatorio, la coordinadora de la Oficina de Migración de Rancagua, María Inés Rodríguez, aseguró que “esta actividad, para los venezolanos, fue muy buena”. “Se aclararon muchas dudas que tenían, muchas falencias en salud, gobernación, en general regular su documentación. Las respuestas que se les dieron fueron buenas. Se nos viene un gran trabajo, un gran desafío, y ahí estaremos como Oficina de Migración para ayudarlos. Los venezolanos son la mayoría de los migrantes, así que todos los acuerdos van a ser de muchísima ayuda para la comunidad. Esperamos que esto mismo se pueda hacer con otras nacionalidades, especialmente con los haitianos”.
Por último, uno de los asistentes, Ciroeni Cardozo, señaló que le pareció “excelente” el conversatorio. “Era algo necesario. Es un acercamiento de tanta gente de que, a pesar de que tenemos una solución primaria a nuestra crisis, nos hace falta esa atención, esa cercanía humana. Ella lee el sufrimiento de tanta gente, porque a pesar de que hemos sido muy bien recibidos, ya tengo un hijo chileno, hay coterráneos que no lo están pasando bien. Lo primero que necesita un ser humano es ser escuchado. Esperemos que esta sea la primera reunión de muchas”, afirmó el venezolano residente en Rancagua.